El olfato es un sentido que todas las personas (excepto aquellas que sufren alguna anomalía o enfermedad) usamos junto al gusto, para decidir qué comida, bebida o perfume nos gustan más.
Hay personas que desarrollan un sentido más afinado que permite detectar matices más concretos en los aromas y los sabores, esto proviene de una pasión por la gastronomía o simplemente por un olfato más agudizado a la hora de detectar las cualidades organolépticas de ciertos frutos, vegetales e ingredientes de cocina.
No es de extrañar que estos enamorados de los sabores redondos queden fascinados con la complejidad de los matices de los perfiles de terpenos de cannabis, pero también con la amplia gama aromática que ofrecen las cervezas artesanales. A continuación, te explicaremos por qué esto no es una simple coincidencia.
Pero primero, vamos a descubrir un poco más sobre el lúpulo, esta fascinante planta que da ese toque amargo con distintas notas aromáticas a la cerveza.
¿Qué es el lúpulo?
El lúpulo (Humulus Lupulus) es una planta trepadora que, como el cannabis, también es dioica, es decir, desarrolla plantas macho y hembra y del cruce de ambas se perpetúa la especie. El lúpulo pertenece a la familia de las cannabinaceas, la misma de la que forma parte el cannabis.
Las condiciones ideales de cultivo para el lúpulo son climas templados algo húmedos, aunque también es capaz de desarrollarse correctamente en bajo temperaturas más frías; por ello, se trata de una planta muy versátil que se puede cultivar en múltiples regiones del planeta.
Como hemos mencionado más arriba, es trepadora, por lo que requiere de tutorado para su correcto desarrollo y para maximizar su rendimiento.
Normalmente el cultivo de lúpulo está destinado a la producción de cerveza, ya que las flores de esta planta contienen lupulina en sus flores, un aceite esencial que sirve para aportar ese característico sabor amargo. Este uso data de la Edad Media, cuando se empezó a implementar, aunque por aquel entonces, se utilizaba no por sus cualidades aromáticas sino por sus propiedades antisépticas que servían para conservar la cerveza.
¿Qué propiedades tiene la planta del lúpulo?
Sin embargo, el lúpulo puede tener otros usos más allá de servir como saborizante para la cerveza. La lupulina, un polvo verdoso que se desprende de las flores del lúpulo secas, tiene diferentes propiedades que pueden utilizarse en el ámbito terapéutico como:
- Antiinflamatorio
- Diurético
- Antibacteriano
- Relajante: puede ser efectiva para tratar las crisis de ansiedad.
- Antioxidante
- Favorece la circulación de la sangre
- Reparador capilar
- Puede contribuir a tratar la dermatitis y el acné (aplicado de forma dérmica).
- Puede contribuir a combatir el insomnio.
Por ello, el lúpulo se usa a nivel terapéutico en forma de infusiones, ya que la cerveza no es la única forma de obtener todas las propiedades de esta planta. Eso sí, como la mayoría de sustancias, también tiene ciertas contraindicaciones, por ello, no está recomendado para embarazadas, mujeres que estén dando el pecho o aquellas que planeen quedarse en cinta o en caso de padecer hiperestrogenia, ya que contiene fitoestrógenos.
¿Qué tienen en común el cannabis y el lúpulo?
Tal y como hemos mencionado más arriba, la planta del lúpulo (Humulus Lupulus) y la marihuana (Cannabis Sativa L.) pertenecen a la misma familia taxonómica, las Cannabinaceae. Sin embargo, esta clasificación es muy reciente, ya que si bien hace décadas que algunos botánicos y expertos en la materia intuían que estas dos especies podrían tener un origen común, no ha sido hasta hace dos décadas cuando esto finalmente se ha establecido con una clasificación formal.
No fue hasta el año 2002 que un grupo de expertos de UK y USA pudo probar que tanto el lúpulo, como el cannabis, como más de cien otras especies, pertenecen a la misma familia; esto lo hicieron analizando los genes de una selección de plantas. Gracias a este estudio, el grupo de investigadores pudo establecer que estas dos plantas con un mismo origen se comenzaron a separar hace unos 27 millones de años.
Por ello, estas dos interesantes plantas tienen características morfológicas comunes, como por ejemplo, similitudes en la forma de las hojas, que son lobuladas y de bordes serrados, así como existe cierto parecido en el aspecto de sus flores: los cogollos del cannabis y las flores en forma de piña del lúpulo, bien podrían confundirse si se ven desde cierta distancia.
Además, como hemos comentado anteriormente, ambas son especies dioicas que se reproducen mediante la polinización de la planta macho a la planta hembra.
Terpenos: el ingrediente secreto
Sin embargo, la planta del lúpulo y la del cannabis tienen algo más en común que no salta a simple vista pero sí está presente en su composición de terpenos, en el que suele predominar el terpeno Humuleno.
El Humuleno, también conocido como alpha-cariofileno está presente en la composición de la planta de la marihuana y, de hecho, fue identificado por primera vez en la planta del lúpulo, donde se encuentra en mayor presencia y el cuál aporta la mayoría de aroma a la cerveza.
Este terpeno no es exclusivo de estas dos especies, sino que se encuentra también en otras plantas como la salvia o la pimienta negra. Si bien es cierto que está presente en la mayoría de variedades de cannabis (en mayor o menor cantidad), sus niveles suelen ser menores que otros terpenos principales como el limoneno, el cariofileno o el mirceno.
Existen algunas cepas con mayor porcentaje de humuleno que otras, como por ejemplo OG Kush, 3 Kings o Gorilla Glue. Una mayor presencia de este terpeno se traduce también en el sabor y aroma de estas variedades, ya que el humuleno aporta notas picantes y frescas con tonos a tierra y a madera. Un aroma que también se transfiere a la cerveza y es que, es gracias al Humuleno que esta bebida tiene ese sabor refrescante y especiado.
¿Qué propiedades tiene el humuleno?
El humuleno, aparte de ser un elemento aromático importante, también tiene propiedades terapéuticas que, en combinación con los cannabinoides, pueden aportar efectos beneficiosos sobre nuestro organismo.
Por ejemplo, estudios recientes apuntan a que el Humuleno podría tener una acción antifúngica combinado con los cannabinoides CBC o CBG; y que, a su vez, podría servir como anticoagulante si se administra junto con el THC.
Interesante, ¿verdad? Ahora que ya sabes más sobre la planta del lúpulo y sobre las cualidades organolépticas del cannabis, quizá podrás apreciar los matices con mayor conocimiento la próxima vez que degustes una buena cerveza artesana, y entenderás porque los sabores complejos tanto de esta bebida como del cannabis vuelven locos a millones de paladares alrededor de todo el planeta.
¿Cervezas con sabor a cannabis?
Después de lo explicado anteriormente, no es de extrañar entonces que los perfiles de terpenos de cannabis casen tan bien con la cerveza. Estos aportan un perfil aromático más complejo e intenso que el lúpulo, pero en cierto modo parecido.
Durante los últimos años, con el auge de la cerveza artesanal, también lo hace la creación de cervezas con sabor a cannabis. Marcas como Sir Hopper, Alameda Beer Company, Locals Only Brewing Co, Cerveja Nortada, Sanson Craft o Canna Hopper son sólo algunas de las aventuradas que se están conviertiendo en auténticas expertas de las cervezas con terpenos Cali Terpenes. Los resultados hablan por si mismos: rápidos sold out y un feedback con los clientes realmente bueno.
¿Llevas tiempo pensando en crear una cerveza diferente que sorprenda a todo el mundo? ¡Adéntrate en el mundo de los terpenos!
¿Qué te ha parecido el artículo? Deja tu comentario para cualquier duda u opinión.
¡Hasta la próxima!
Cali Terpenes